Ella es la niña del parque,
no necesita calzado para ser feliz.
En su mundo solo hay sonrisas,
sus dientes chuecos se muestran radiantes,
no le teme a nada, no le preocupa nada.
Gira, gira, gira y gira, el mundo gira.
Un parante le basta para girar,
pone el cabello a volar,
para ver el mundo a colores
mira al cielo encima del mundo,
solo hay felicidad, no le interesa más.
Gira, gira, gira y gira, el mundo gira.
Libre en su realidad,
el vestido a cuadros hasta el tobillo,
la chompa sucia y sin importar,
con su peinado qué más da,
la niña del parque ama su libertad.
Gira, gira, gira y gira, el mundo gira.
No mira a nadie, no piensa en nadie,
tomada a su poste libera su mente,
qué sonrisa tiene la niña del parque,
no se percata de la presencia infante,
la niña del parque lleva la felicidad del mundo.
Gira, gira, gira y gira, el mundo gira.
Su padre la lleva a la escuela,ella lo disfruta,
la cara bien lavada y la falda recta,
los libros los carga como sea,
el conocimiento está opacado por su tranquilidad,
sonríe con la mano de su padre tomada.
Gira, gira, gira y gira, el mundo gira.
La niña del parque no entiende la lección de hoy,
antes de irse ya la había aprendido,
se trata tanto sólo de vivir y haberse alegrado,
no le importa la soledad, no le importa el tiempo,
ella nos enseña que es la felicidad.
Gira, gira, gira y gira, el mundo gira.
Noviembre 2010.
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